domingo, 29 de noviembre de 2015

Estoy.

Plasmada en una nube de pensamiento creativo, estoy.
A tu lado, mi mano en la tuya imaginando, estoy.
Con pleno consentimiento de desperdiciar el tiempo, estoy.
Corriendo en pleno desierto de mar y sol, estoy.
Escuchando el susurro del viento que grita tu nombre y el mío, estoy.
Mirándote de lejos, estoy.
Mirándote bien de cerca, estoy.
Comparando como luces más hermoso, estoy.
Hablando poco, estoy.
Creyendo que en mi mano está el mundo entero, estoy.
Mi mano sigue en la tuya y yo, estoy.
Soñando con el verano, estoy.
Descansando en tu hombro, estoy
Dormida en tu regazo, estoy.
Feliz como nunca, estoy.
Ausente aparentemente, también estoy.

martes, 3 de noviembre de 2015

Y como es un día tres...

Los días se me pasan rápido, siento que despierto y ya en un par de horas se me ha acabado el día, tengo una rutina no repetitiva pero que se cumple de forma cíclica, allí estoy terminando una tarea y antes de sumergirme en la incesante búsqueda de conocimiento en la que nos ahogan en la universidad; me tomo un momento de libertad escrita, pues tanto tengo que hablar y sólo se me olvida que nada mejor que escribir para suprimir ese deseo de expresar tanto.
Y como es un día tres, pues te lo dedico mi amor:

El momento que vivímos es el de la salida del sol tras la noche oscura, nos sentimos felices y unidos, quizá hablo por ti y generalizo el sentimiento, al menos yo después de dejarte en tu casa me ardían las mejillas de tanto sonreír por ti, y con eso en mente te escribo éstas alegres palabras.
Lo que me hace inmensamente feliz es tenerte, y poder apreciar todos tus matices, cada momento, encontrar en ti cosas que he desconocido y ahora aprecio más que nunca, es poderte ver sonriendome, es tener ese abrazo cálido calmando mi pecho cuando ha estado intranquilo, es tu paz y tu cariño constante que supera todos los sentimientos incómodos que pueda albergar.

La paz, la tranquilidad de tu alma que se me contagia, la felicidad tonta que a veces se entromete en nuestras conversaciones profundas, las risas y los silencios bien dados entre un beso, el descanso, el abrazo, la caricia y la mirada.

Es magnifico sentir todo ésto, saber que todo esto es propio de ti, que el sentimiento se da así por ti, por como eres, como surges de la adversidad con una sonrisa impactante y real que demuestra la más pura creencia que sólo con buena actitud se conquista éste mundo, te doy de ejemplo mi vida, que conquistaste el mío.

Por cuestiones de tiempo, la carta concluye aquí, pero la felicidad inspiradora y la musa de adorarte cada vez más, no se pausa ni en segundo.

Amándote como si no hubiera un mañana,
Rosani.

jueves, 24 de septiembre de 2015

A ti te ama

Mientras he estado en este reposo he visto y sentido una gama de emociones tan grandes como una de colores, pero en éste instante siento que cada minúscula cosa vale la pena, cada momento triste tendrá muchísimo más tiempo de recompensa.

He tenido el mayor de los tesoros en mis manos, es algo más que la ternura de un amor de niños y en la gracia de un amor a una preciosa mascota, va más allá de todo lo que he conocido y cada día estoy en un campo de batalla nuevo, pues siempre temiendo el fin olvide de recolectar piezas y mantenerme siempre atenta, siempre en juego.

Mi baúl de piedras preciosas no es otro que un chico alto de ojos grandes, de esos ojos siempre posados en ti, cautivador y mágico, así es él.

Me arrulló y me acunó en las noches más frías, pase lo que pase, cree en mí, cree incluso en lo que yo misma no conozco de mi, me ama sin pensarlo y siempre espera lo mejor, suelo pensar que su nombre no es coincidencia y que de su alma exhala paz y espero de corazón que no se me arrebate tan pronto como llegó, que al menos pueda yo interceder en el destino del tiempo que podré seguir a su lado.

Se que lo que veo y creo ver en él es solo un espejismo, pues todo lo bueno que he conocido de este mundo se encuentra en sus besos y en sus caricias. Por más incómodo o harto que un día esté, se que su corazón noble, que es mi hogar, jamás se verá corrompido por sentimientos de rencor.

Escribo esto como la reflexión más absurda del mundo, para recordarme que el atardecer se queda sin gracia frente a tus ojos brillando y que la mismísima brisa del mar que tanto añoro, sólo sería el mas áspero viento mojado, sin nada especial, solo con pensar que esté lejos de mi hogar, de tu mano, de tu mirada, de tu sonrisa inesperada, de tus bromas y de esas mil risas extrañas que solo tu me sabes causar, las risas mas feas solo tu las has podido escuchar.

Y te amo por quién eres, por quien serás y por quien has sido, por una personalidad de diamante, quizá solo otro igual a ti podría en el fondo cambiarte. Por las grandes alegrías que me has causado, por la esperanza que le regalaste a este mundo quebrado en el que viví, por todo esto mi amado insisto hoy en lograr amarte a plenitud, es un camino de piedra, pero jamás has soltado mi mano, y quiero apretartela también y merecer esa unión como nunca antes.

Jamás quiero que olvides que el amor más grande que he sentido es por ti y sólo por ti, por la maravillosa persona que eres, porque cualquier chica que conociera un tercio de lo que yo conozco de ti, jamás te soltaría, eres de las joyas más preciadas, de las que no se comercian y sólo se miran de lejos en un glamoroso museo, no exagero, eres mucho más de todo lo que pueden mis dedos escribir y mi mente describir.

Ésta señorita, aspirante a mujer,
Aspirante a dama correcta y delicada...

Ésta tonta, a ti te ama.

lunes, 21 de septiembre de 2015

Una vez más.

¿Y si te deleitara mi voz y pudieras oír mis cuentos hasta entrada la madrugada?

Quizá no precisamente eso dejaría una sonrisa de porcelana inmóvil y fresca en mi rostro, por esta noche, así como muchas otras antes y las que vendrán, preferiría tener mi brazo cruzando tu pecho y que me abrazaras suave pero firme y de forma dulce, que cuando te quedes dormido forme ese candado que me atrapa entre tus brazos. Aunque no espero sentirlo en realidad, pues quisiera dejarme llevar por la sensación del tacto de mi piel interactuando con la tuya, por tu olor y por el amor que me invade en esos abrazos dormilones.
Esta noche parece que no tengo mil historias ordenadas que contar, más mis brazos siempre te saben abrazar.

Entre mis sábanas y la comodidad sólo deseo dormirme en tus brazos una vez más.

domingo, 23 de agosto de 2015

Citas averiadas

"... y me faltó ser callada cuando mis acciones hacían tanto ruido. Ahora me quedan las historias románticas que sutilmente me hieren profundo, en el fondo a una sombra de chica como yo, los libros con grandes enamoramientos de un capítulo pueden condenar el alma a una serie de recuerdos desconsoladores de otra época donde ignorante, se fue muy feliz.
Por supuesto que las entrañas traicionan y terminas actuando cual maquinaría averiada, con movimientos propios de cualquier órgano menos el cerebro o el idealizado corazón, válgame, cuánto daño me proferí a misma, dejándome hundir en los profundos mares de la inflexión y siendo un ser incansable en lo que jamás debió ser aprendido. Hoy miro con soledad que el color negro me cubre perfectamente para no dejar resquicio aireoso de mi cuerpo que mostrar, pues la desdicha aún mana de esta piel, la razón fue mi soberbia que empaño el amor más pulcro y pacífico que he sentido.
En algún punto reboso de tranquilidad, aún siento tu mano dibujando mis mejillas con tus caricias, pero no se por cuánto tiempo no estés. Se necesita mucho tiempo en un corazón para curar lo que yo he hecho.
Lamento con mi vida lo que he causado, quisiera poderme quedar abrazada a tu abrazo por unas horas y poderte sentir bien presente, para evadir esta idea de la soledad apresurada que me invade y debí..."

jueves, 6 de agosto de 2015

No es tan difícil, siempre que no te rindas.


Ahora mismo llorar y caer en la desesperación de no saber que hacer es lo más rápido, la única solución. En el fondo de mi corazón eso haría yo también, pero me lo impide una idea, una simple corazonada que ahora escribe por mi estas palabras, aún en alguna rendija de mi alma se asoma la esperanza.

Y es que no acaba aquí y no se detendrá el tiempo, no es momento de derramar lágrimas, porque nos he visto bastante lejos de la juventud efímera y problemática de la que tanto he divagado, sufrido y estancado mis palabras. Aún te espera una etapa mas grande, un crecimiento mas magnífico. Tienes oportunidades regadas como minerales en tierras fértiles, solo no debes rendirte.

Te veo sonriente, te veo condenado a una vida alegre y sencilla, llena de momentos que llenan y palabras bonitas. Te he visto danzar entre la mas fina paz y la mas alegre inocencia, porque eso te mereces.

Estas tan cerca que lo ves tan lejos, pues cuando la meta esta en las narices las piernas fallan y la mente cede y prefiere rendirse. Conozco esa sensación también, pero te recuerdo que no iniciaste este viaje con miras a abandonar el barco. Sino llegar a tierra firme. Que no te espante la neblina, ni la brisa rápida de tormenta, que no fracasarás.

Es que la felicidad siempre esta al alcance de la mano, hay momentos de oscuridad, solo no olvides... encender la luz.

sábado, 11 de julio de 2015

Esperar

Falta poco para la medianoche con un cuarto, y se que para cuando termine de escribir se le habrá sumado a la hora unos quince minutos más.
Es un aspecto importante que mi hora límite para dormir son las once, vagamente me he distraído en un sinfín de cosas, en un libro, en vídeos, imágenes, chistes, juegos... Todo por dejar pasar el tiempo.
Indiferente a cruzar mi hora estipulada, aquí me hallo, sin dormir y con pensamientos vagos y sin fuerza en mi mente, lo que me mantiene despierta sin duda cada día son las conversaciones con mi amor, pero si no está en casa y no me puede hablar, ¿qué hago acostada esperando sin más?
La respuesta es esperar, dos, tres horas; quizás más, sólo por la esperanza de hablarte, de que tengas un segundo libre, de que me encuentres despierta, de mandarte muchos besos de buenas noches, no uno, ni dos, no te gustan limitados.
Dormiré, en cuanto descanse, aun un poco inquieta, pues no creo tener la suerte de poder despedirme, pero se que te veré en pocas horas, y sobre todas las cosas, me servirá de canción de cuna esa idea.
Concibo, ahora luego de muchas lunas llenas y tribulaciones de malas estrellas, que la espera más dulce es para verte, y que en los momentos junto a ti, confirmo que el tiempo es relativo.
El suave murmuro de tu piel, tu aroma sencillo y suave, tu extravagante sonrisa y tu firmeza radiante, ¿quién no esperaría por tan hermosas dichas?.
La palabra certera, la caricia precisa, la esperanza furtiva y el aliento de hierro, eso para mi te caracteriza, además de tu humor solemne y tu risa prodigiosa.
Y quise hoy escribirte elegante, como te veo ahora, elegante, maduro, y por supuesto tan hermosamente magnífico. Esto no lo leerás ahora mismo, como yo deseo, quizá tampoco mañana, pero te escribo porque extrañare mucho esta noche hablar lindas bobadas hasta dormir. Bobadas que conservo en mi mente por siempre.
No diré que deseo esperarte toda la vida, pues no lo deseo, más me agradaría abrazarte toda la vida o besarte por el resto de mis días; pero su espero que aguardar a que llegues siempre sea este momento mágico, de ilusión por algo que te encantaría ver y que su presencia es simplemente alegría.
Cuando llegas mi alegría es un gran frasco de purpurina pegajosa que cae toda encima de mi en un segundo, indiferente al momento, mi alma queda prendada de la seguridad que tu traes con tu paciencia y bondad.
Mira tú el destino y la gracia que lo envuelve, esperarte ha valido toda la pena del mundo, si me acabas de llamar y me alegras la noche en un instante.
Como te quise en un inicio, como te adoré desde siempre y como te amo cada día, como te amaré por siempre, siempre esperaré por tu abrazo, tu beso y la despedida dulce para terminar el día.
Aunque no quiero acabar esta carta suelta, porque siento que te dormirás al terminarla, claro que no es así y tendré que irme ya y dejar que las señales telepáticas para mañana.
Con un sinfín de besos, promesas, abrazos e ideas para una vida juntos en mente, me despido, imaginando un abrazo, imaginándote aquí, durmiendo con tu beso siempre en los labios.
Hasta mañana,
Te amo.
Rosani❤

martes, 12 de mayo de 2015

... y llenarte de belleza el aire que respiras.

Veo vestirse de colores maravillosos a toda la naturaleza, lo que un día admiraba y ahora lo siento tan lejano; las flores no se verán tan bonitas si en el mismo día te noto distante.
Es difícil creer en los sueños y aspiraciones de mi misma en éstos momentos, pienso que nadie puede ir tras sus propósitos si ha dejado algo herido en el camino; me siento ahora tan frágil, pero al mismo tiempo me siento fuerte, así como me siento paciente, emprendedora y justa; pero en mi ser está la lucha entre dos ideas fundamentales, obrar bien para ser feliz, y pensar que para ahora mismo obrar bien debe seguir carcomiéndome la conciencia.

Incluso en la más pasajeras de mis acciones trato ahora de dejar las cosas para ser sólidas, para durar para siempre. Nunca me di cuenta que mis hoyos negros dónde sufrí al caer, son producto de carencias que un día me cree, es dificil ver como he destruido muchas cosas que había logrado lentamente, y ahora amargamente escribo esta nota de tristeza, pero nadie puede compadecerse de ésto, y menos yo misma.

Me inspiro en el árbol que aún cuando sus obras más lindas, que pueden ser las flores y frutos, puede que no lleguen a ningún lado, pero lo hacen por ellos, y no por quien vea; pude aprender tanto de la naturaleza mientras admiraba, si hubieradejado de pensar en bagatelas, hubiese venido a mi lo esencial y me habría encontrado con el amor a la verdad hace mucho tiempo.

Mucho he cambiado, y mucho me falta por cambiar, hondo pesar en éste pecho, pero hondo también es al amor que le tengo a nuestro futuro.

Quien obra mal, obra doble, o mil veces hasta hacerlo bien. No tengo ya mil veces, pero sigo queriendote amar, y quiero hacerlo como nunca, quiero que sientas toda la felicidad que un alma pueda brindarte; quiero tu seguridad, tus sonrisas y tu mirada cariñosa.

Quiero ser naturaleza y florecer después de tanta amarga tormenta; podré, porque hasta que no lo haga no tendré a mi mejor amigo, complice, mi apoyo incondicional, mi verdadera fuerza, mi hogar, mi rumbo infinito, mi razón para creer en que todo puede ser mejor si quieres que así sea, que es sencillo, cuando con perseverancia lo intentas, lográndolo sin darse cuenta.

P.d.:
Resumiendo,
quiero amarte siempre...

martes, 7 de abril de 2015

Hoy y cien mil veces mañana❤

Me encanta el preciso instante en el que enfoco mis ojos en tu rostro, y se que me quedo mirándote distante, pues estoy pensando, en ti, claro está.

Puede que haya visto tantas veces esos ojos como para describirlos de memoria, y puedo, por supuesto, pero no hay nada en éste mundo que me guste mas mirar.

Aunque cientos de veces he repasado tu ropa y otros cientos de veces tu rostro, a pesar de que mil veces me he repetido cuantas cualidades tienes y cuán afortunada soy de tenerte en éste preciso momento de mi vida, por que me complementas completamente y no esperas que sea perfecta, pero que nunca me niegue a un buen consejo para perfeccionarme; entonces, ya se todo esto de ti, lo pienso al dormir y al despertarme, al verte y recordarte.

Y encuentro una placentera satisfacción en que, cien mil veces lo pienso, cien mil veces me parece importante pensarlo, cien mil veces te he visto y he afirmado para mi, que eres hermoso, jamás pierde la esencia, jamás se siente tonto pensarlo; incluso creo sentir que cada día me pareces aún más maravilloso y aún más hermoso, y cada segundo contigo, noto que quiero pasar contigo muchos otros millares de segundos.

Puedo decir que cien mil veces te he visto, cien mil veces me he quedado prendada de ti y cien mil veces te he amado, y espero que falten otro millón cien mil de veces.

Porque nada de ti me es ajeno,
ni tu nombre puedo escuchar sin sentirme aludida.
Porque me emociono si te veo por tercera vez en un día, tanto como el primer día.
Porque siempre siento tus pesares como míos y en mí estalla una fiesta con tus triunfos.
Porque decidiste hacerme tuya y yo hacerte mío.
Porque ese 'mío' me llena de orgullo.
Porque te amo, hoy y cien mil veces mañana.

lunes, 30 de marzo de 2015

Largas noches de filosofar.

En los matices de cada pequeño momento empiezo a apreciar como el amor podría ser nada más que sentir.

Quisiera ahora enumerar uno a uno los sentidos, dando por ejemplo los mas dulces recuerdos, que como melodías me acompañan de fondo en las largas noches de tanto filosofar.

Mi favorito, ver. Enumerar con mis ojos cada detalle precioso de la persona más grata y dulce del mundo, amar podría ser simplemente hacer mucho contacto visual y estar cómodo en el fondo de sus ojos, querer quedarse ahí una eternidad. También valen esos momentos en que ver se convierte en sonreír, en que ver se transforma en paz, armonía, serenidad y belleza. Ver sus pasos largos hasta la puerta de mi casa, me estremecen con la paz más inusual y nerviosa del mundo. Ver sus sonrisas detiene la luz de todo su alrededor para concentrarse en lo brillante de su semblante y la hermosura de esa mueca que aparece natural.

Placer del mundo, oír. Las voces pueden reconfortarte aún si las palabras son discordantes, aún si no saben que decir y te hacen reír, aún así, hay una melodiosa voz que te hace sentir sentada en un sofá sin menor preocupación, que te hace sentir en un hogar puro y único. Te puede hacer entender en un segundo cuan fácil se estremece el corazón cuando un ser querido suena simplemente decaído.

Uno personal, oler. Un olor atrae tantos recuerdos como una foto vieja, más un olor puede atraer situaciones distintas, miles de momentos conglomerados en un mismo segundo. Nada mas inocentemente lindo que quedarse en blanco en medio de un sitio lleno de personas y reconocer un olor, un aroma que te da comodidad, que quieres salir corriendo a buscar una vez lo percibes, que extrañamente te toma por sorpresa y te roba una sonrisa amena.

El gusto, sin mucho alarde. No sólo incluye que un beso no se parece en un "triz" a otro, podría ser una buena comida que significo un buen ambiente, que atrajo buenas palabras, que significó un día grandioso, que quedó para la historia. También se traduce a recordar la emoción de un beso robado, la pasión de un beso a escondidas y la dulzura de un beso de cariño.

"Curioso, esto es muy curioso...", hablo del tacto. Porque me encanta deslizar la yema de mis dedos en sus mejillas, en su cuello cosquilludo, delineando su nariz y sus cejas pobladas y perfectas. Es un placer sentir un abrazo, el toque de un beso, la firmeza de las manos entrelazadas, ese revuelo de decisión al tomarme la cintura... Son momentos que percibo mejor a ojos cerrados. Creo que el amor se define mejor con el tacto, con el más innato de los sentires. Con la placentera sensación que és sentirle cerca.

Pero no ignoro que el amor se conserva pensando, comprendiendo, mejorando y aceptando que muchas veces el oído ignora, el tacto confunde, la vista juega bromas y que mi nariz suele ser inútil❤
Es recordarle como fuerza en ese momento difícil, es pensarle cuando ves su banda, su canción, esa comida especial, el dulce favorito o su color preferido. Es recordar todas esas cosas también, es olvidarlas e intentar conseguir la información también.

Es luchar, es fomentar, es creer y sofocar lo incierto del egoísmo que a veces conlleva. Es, a fin de cuentas, amarte y dejarme amar.

sábado, 21 de marzo de 2015

Pequeña soldadita de plomo.

Estoy sumida en pensamientos pesados, como el mismo plomo, grises, ocupando espacio, malinterpretando el mundo. Crecer no suele ser sencillo, pero cambiar de etapas puede sumirnos en un auto abandono, por más fuerte que nadamos en éste sin fin de cosas nuevas, nos hayamos sin rumbo, ni podemos retornar de donde salimos, ¿Qué hacer?.

Ahora las decisiones sencillas son cuestiones de segundos y pueden traerte grandes problemas o grandes alivios, y son cosa enteramente tuya; estás parado en una red de opciones, y sólo decides a donde ir, es sencillo, más cuando te paralizas y sientes como te atrapa la red sintiendo que toda opción te deja al fondo sin mejoría, entonces te agotas.

Suena en mi mente, que no estoy sola y soy muy fuerte, que voy un paso adelante cuando otro se retrasa dos, que apenas comprendo como funcionan mis nuevas posibilidades puedo salir del fondo de la red y elegir a mi parecer lo correcto, y que estaré bien si me equivoco, así podré aprender más adelante.

Y aquí, como si tuviera fiebre y por compresas usara la música... me dejo llevar por el pensar, y entre enmarañados apuntes en mi cabeza, se que albergo paciencia y amor en mi corazón, y nadie puede negar que sale el detrás de la más terrible niebla.

viernes, 27 de febrero de 2015

Maravillas.

¡Oh, Cariño mío!, flor de mi jardín, ¿puedes tú decirme, qué sería de mi.. sin tí?

Tengo dos colitas separando mis cabellos, una sonrisa en los labios y un pretexto para musitar palabras de amor; tengo un té que jamás preparo, pero en mi mente sabe muy bien, una canción que mis dedos poco a poco van tocando pero que mi cabeza la reproduce a millón, te tengo, travieso, bromeando sin razón.

Ocurre que me cabe la felicidad en una cajita, pero que si la abro daría paz al mundo; ocurre que si me duermo temprano, me siento la más desafortunada del mundo; pasa que la luna hermosa me espera a que la vea, pero yo tengo muchas mas bellezas que ver.

Sucede que se me olvida decirte que estoy sana y salva en casa, porque estoy muy ocupada, acurracada en mi ropa usada que da ese leve olor a una tarde de muy buena compañía. Me pasa que te pienso mucho, pero para hablarte pienso poco, me pasa que los nervios no se me han ido en el tiempo ni un tanto menos, cambiaron, como yo, pero si fuera un cambio de oruga a mariposa, seguro vería a ésta escondida arrastrandose y comiendo hojitas.

Comentan que soy imprudente, un tanto impaciente, volátil y poco sutil, resulta que no se de que me perdí, iba a comentar algo bonito, seguro empece hablando de Peter Pan y se convierte de pronto en Godzilla; ¡vamos! piensa luego habla, luego escucha, luego piensa... bien, estaba pensando otra vez, ¿crucé la calle sin ver? Halan mi brazo, eh si, creo que ese auto no lo ví.

Poseo un caballero sin caballo, el futuro hombre del año, el más paciente de todas las criaturas que éstos ojos han detallado alguna vez; lo he visto preocupado, aconcojado; y aveces me siento tonta al pensar, que en ningún momento falta uno de mis mas recurrentes pensamientos, bajo cualquier sentimiento el inconsciente me susurra indiscreto: "Se ve tan hermoso", poseo un caballero realmente hermoso de ceño fruncido por mi actitud, pero que no tiene similitud con el mundo exterior, es único, precioso y tan amoroso.

Tengo toda la valentía de cuidar mis vestidos, mirar a los lados antes de cruzar, de recordar y ser cortés, de hablar menos y analizar el momento, de no juzgar y pensar discreta esas cosas feas que se suelen notar; tengo toda la valentía de hacerte sonreír cuando estés mal, de hacerte creer que el cielo turquesa y te llamé a las 6, pero también de retractarme de lo que no se.

Conozco unos ojos de un color muy hermoso, es como mezclar chocolate y café, con la unión de sentimientos bonitos, con un cielo lleno de esperanza como fondo y chispeado con proyectos para el futuro, enmarcado con mucha fe y promovido con mucho esfuerzo, como una obra de arte que apenas ves, te cambia la forma de ver el mundo, que te inspira a no perderte ahí para siempre, sino para ver al mundo con valentía y no perder de vista una moto en la autopista, que te hace encarar al mundo aún con las manos vacías y sin protección, que te hace sentir en casa en medio de una noche sin alegría.

Susurro que es el hombre de mi vida, pero mejor le digo que le amo, suena menos al mañana indescifrable, suena más a la tarde de hoy y a ese beso en la frente que me carga de emoción.

Tengo recuerdos para montar la mejor película de Romance que nunca viste, la que te pareció cursi y a la que le ganó una de terror; pero que estoy segura que a mi lado vería. Albergo recuerdos de cuando medio dormida en el taxi, sostenías con mucha dedicación mi cabeza, para que ningún movimiento se atreviera a despertarme; tengo garabatos más valiosos que todos los museos de París que hicieron mi novio y amante, siempre campantes.

Repito la firma más hermosa del mundo, que no puedo evitar pensar como tu la trazas para que quede más artística y menos un desperdicio de tinta en un formulario; repito en mi mente tus lecciones de vida, tus argumentos y tus salidas.

Tengo mis cabellos lisos enmarcando mi rostro, una sonrisa pícara y la vista fijada en tu ventana; el cuerpo escondido por si sales antes de que lo que yo pensé, y los brazos listos para el mejor abrazo del mundo, apareces y te 'asusto' sonriente.

¡Oh, Príncipe mío!, ¿has visto de cuantas maravillas me has proveído?

jueves, 12 de febrero de 2015

Mi parte del cuento.

Es difuso pensar que hace nada, unos cuantos meses atrás, llegaba de mis clases, con toda la monotonía y frialdad que podía contener mi cuerpo, tirando el teléfono en la cocina y ponerlo a cargar, responderte un par de mensajes, ver que en ese desierto virtual nadie más me escribía.

Creo que en momento en que en pleno debate de la materia que mas me animaba fue que me di cuenta que de verdad me estabas gustando mucho y estabas despertando en mi un mundo nuevo, las hojas de mi cuaderno estaban llenas de letras con perfecta caligrafía que deletreaban tu nombre. Cuando vi tu nombre plasmado y sonreí sin querer, se me revolvió el estomago y me quede pasmada en un silencio que apareció de pronto, en el fondo hablaban, un tonto intentaba responder una estupidez a una respuesta que yo me sabía perfectamente, pero algo opacaba esas ganas de alzar la mano y contestar, tenia mas cosas en mi mente, te tenía dando vueltas en mi cabeza.

No podía mentirme, pero muchas cosas rondaban también mi cabeza, quizá no eras ni remotamente el indicado, podías no tener corazón, no es que en ese momento yo fuera toda amor, pero cabía la oportunidad de que me lastimarás mas de lo que ya estaba, ¿se podía eso?

Miraba las baldosas del salón de baile, estaba envuelta en ti, me habías sacado de mi encierro de medio año, la verdad no entendía nada, estabas tan seguro y tan lindo en un suéter y tus bermudas, ya casi no las usas; no podía dudar mucho mirándote.

Querías besarme y hasta me pediste permiso, ¿te acuerdas?. Creo que una cosa que me dejaba perpleja de ti, era esa preciosa manía de tomar mi opinión antes de empezar cualquier cosa, jamás dije que no, pero me encantaba responderte insistente siempre un si.

Luego vivía pendiente de una nota de voz, ¿a que hora llegarás? ¿qué te pasó? ¿donde estás? ¡Me preocupo!
Llegabas de pronto, me explica as risueño y yo de preocupada pasaba a ser la princesa mas feliz y hueca del mundo, sin nada que me incomodara.

Cada noche, casi madrugada te despedias siempre diciendo algo lindo, corto, sincero pero tan real, aprendí a valorar palabras sencillas de grandes sentimientos.

En un principio me daba pena decir cualquier cosa, releía los mensajes, escuchaba mucho la música que te gustaba. Le agarré amor a tu disco favorito y hacia alarde de eso. No quería parecer tonta contigo, ni por un segundo.

Un buen día se me ocurrió darte regalos de chucherías, al final, no eran cursis, era un detalle y no era eterno, era para alegrarte el día o la semana, yo tenia algo en que concentrarme: ¿Qué le llevo esta vez? No puedo preguntar mucho, siempre debía ser sorpresa, y curiosamente casi nunca fue sorpresa. Otra cosa nueva, siempre necesitaba contarte todo, incluso dañar las sorpresas iba incluido en eso.

Con el tiempo descubriste cosas menos alegres que aquellas geniales cosas que teníamos en común, encontraste el mar de cuestiones erróneas, malas y absurdas en la que vivía, escondiéndolas por supuesto y tapando todo con mentiras sobre otras para poder sonreír sin mostrar penas.

Supuse que como siempre, ahí acababa la historia y tendría que volver a ser fría o a estar herida, no sabia como respondería si te ibas, nunca había sentido un cariño así, suponía que en el fondo no estaría mal, sino seria fuerte y te dejaría buscar una manera de ser feliz lejos de mis complicaciones.

Suspiraste cada vez, me perdonaste cada vez, sonreiste de nuevo y me amaste como nunca, suponiendo que por una vez Dios se apiadaba de mi existencia y alguien tenia paciencia conmigo...
Pero era mas que paciencia, era aceptación y por sobre todo, amor.

Tumbé pilares y destruir muros, redecoré fachadas y destruí miedos y marañas. Me sentía desnuda en tu presencia, sabias todo de mi, conocías cada cosa que me importaba, que había echo, que había estado bien, que había estado mal ¿y que hacías al respecto?. Abrazarme y mantenerme junto a ti.

Me hiciste alzar la cabeza y sonreír, me decías que era una mujer maravillosa; me hiciste maravillosa, me sacaste de todo aquello que me impedía ser feliz.

Y tú, lucías tan despreocupado en tus bermudas y esa sonrisa de que te resbalaba la opinión del mundo, por dentro había miles de cosas mas interesantes que me encantó descubrir, proteger y por supuesto, amar.

Ahora, cada vez que te veo, luces mayor, maduro, todo un caballero hecho y derecho; otras veces una pereza entre una sabana haciendo quejidos, o abrazandome fuerte para que no moleste tanto y duerma tranquilamente, pero de igual manera esta historia es mi versión de lo es todas nuestras experiencias, nuestros días grises y de colores, nuestro bellísimo año juntos.

Pude errar mucho, pero una decisión puede arreglar todo de un brochazo, la mía fue... confiar en ti.

lunes, 19 de enero de 2015


"Sin ti, las emociones de hoy no serían más que la piel muerta de ayer".
- Hipólito.

Entonces me dijiste que aquella melodía te sonaba triste, más en lo profundo de mi corazón yo la siento como el más hermoso grito de mis sentimientos hacía nosotros, hacía todo lo que siento en éste precioso y preciso instante.

Comienza sonando suave, ¿cómo más inicia un corazón roto a amar?, pero levemente se va acelerando y llega al punto en que no puede detener con las manos al universo entero que se alberga ahora en su pecho.

Se mezclan mis recuerdos, y veo, veo tardes soleadas y tristezas del pasado, te veo claramente sonriendo, bailando, riendo; es como si la melodía albergara un baúl de memorias.

Luego se hace una pausa dulce, ese cariño inmenso que de pronto nació en ti hacia mi, y yo sólo era oídos para tus palabras.

Con el tiempo, todo sigue, se va tornando más denso, peligroso y feliz, pero todo cuesta, es difícil atravesar largas tormentas de arenas, pero nos veo, juntos al final de cada una como si nada pudiera ser más fuerte. Reconozco ese brillo cuando te emociones y lo recuerdo cada noche como algo insesante e irrepetible al mismo tiempo, con una mezcla de emociones que se van duales, entre la pasión más loca y el amor más dulce.

Quizá no sea fácil de entender, pero me dejo llevar entre sentimientos y ese bello vals... entonces duermo y todos tus gestos y tu amor incondicional queda grabado para siempre y yo, despertando por la mañana me preparo para otro de esos días cargados de emociones, que se sienten como una increíble travesía, me hace sentir viva.

Esa sensación que me da cada vez que te veo, el cómo podría simplemente enamorarme de tus pestañas una vez más, podría reposar en tu pecho muchas otras veces y sentir como tu latido se tranquiliza y conforme el mio también. Todo un mar de cosas simplemente hermosas y eso es lo que se esconde en mi mente cuando paso las horas oyendo el mismo vals.