jueves, 29 de noviembre de 2012

Verde esplendor.

Mas que la luna, lo hermoso, fuera de lo asombroso; encontré un paraíso, sin parecerse un carrizo a lo que imaginé, fue mejor desde que apareció cruzando la esquina de un corredor.
Traza conmigo un sendero colorido, cuéntame si sueñas como yo contigo, hagamos de hoy la ilusión de mañana, que será el pan de nuestra morada.
Mira mis sueños, están malheridos, mi pasado y el tuyo son tan parecidos, propongo que el futuro sea compartido.
Ahora veo el cielo que está sobre mi, alzar la mirada, poder ser feliz; miles de horas esperándote que no son martirio de este corazón, mis mariposas se alborotan con sólo imaginar verte llegar, cuando llegas mi alma en paz está.
Conforme tu pedido me libro de miedos, dejo mi imaginación ir, ya la veo volar lejos.
Se disipó la niebla y ha salido el sol a regalarme su esplendor, verdes ojos de resplandor.

sábado, 10 de noviembre de 2012

Entre el pandemonio, una mariposa.

Callaré lo que mi mirada explica, no puedo ilustrar lo que ella implica, corta se me ha quedado el habla, no puedo teclear tan rápido el vuelo de ésta mariposa que entre las notas de un teclado se me ha escapado, ahora la siento, ahora ella es libre, con todo el amor que en ella simbolicé ha volado más lejos de lo que pensé.

Jugueteando con mis pensamientos, estoy en blanco y es complicado ver todo lo que ha pasado, tan acostumbrados al mal que el bien nos ciega, nos empaña la visión y nos tortura la pena de creer que apenas al girar se desvanecerá, pero en aquel pandemonio leve y fugaz, alzo el vuelo esa grácil mariposa, en un momento dorado, inesperado, simple felicidad, y todo se resume a tu mirar.

jueves, 8 de noviembre de 2012

Sátira de un esbozo imaginario.

Me imaginé la escena...
-.Tu recorriendo todo el bulevar con gritos y alardes haciéndome quedar mal tanto fuera posible a tu alcance, haciendo levantar mis muros pintados de azul, intentando esconderme, acorralarme a amarte por la decepción tuya de hacer que me marchara y haberme perdido, buscando realmente, mi estancia por siempre, y tu intransigente a aceptar tiras flechas a matar.
Pasa un rato  y en el silencio mi imaginación da una vuelta a la situación.
-.Mi luz, inunda los muros entre azul y gris que caen, y yo, camino y en el iris de unos ojos de ese, mi color favorito, vi como se perdía mi resignación a tu recuerdo, ya las canciones que escuchaba en tu nombre, ahora son melodías sin historias para contar...

Todo da vueltas, lo imaginado ahoga y casi empiezo a hablarte sobre él, otra vez, pero me dices preciosa, río imaginándome como una perla, pues solo ellas son preciosas, tan estimadas y valoradas, me hace gracia el absurdo razonamiento y cuando caigo en cuenta ya mi imaginación no está despierta, se ha dormido soñando una perfecta cena en Paris, lejos, muy lejos de aquí, y concluyo en que tropecé para terminar en el Camino a la Felicidad.