Marcos al fin la soltó y sonreía radiante, como nunca lo había visto antes Anne.
Tu tía me pidió que te quedes conmigo, no quieren que vuelvas a casa de tus padres.- decía Marcos mirándola y hablando rápido, dicen que eso te deprimiría.. Así que.. ¡ Puedes mudarte conmigo! o claro si prefieres, sola en un apartamento, pero dime que vienes conmigo, ¡Tienes que aceptar! Te lo suplico!
Anne quedó boquiabierta, quizá demasiadas noticias en menos de 30 minutos, en esos 5 días disfrutó como jamás en su vida y también se había quedado prácticamente sola.. Todo cambió tan repentinamente.. Era difícil en aquel momento para ella pensar con claridad.
Anne entre sus pensamientos se había quedado muda, dirigió su mirada al suelo.
Luego de unos incómodos minutos, y de que Marcos estuviera cada segundo mas ansioso por escuchar una respuesta.. Ella sonrió y lo miró, tenía las mejillas bastante coloradas, y tímidamente asintió.
Él no necesitaba nada más, estaba feliz, la abrazó de nuevo y luego buscó en el suelo el Celular de Anne, que hace un rato había lanzado de la emoción.
Llamó a a la tía de ella y, todo resuelto.
Ambos sonrieron, tomaron sus maletas, caminaron de la mano y salieron del Aeropuerto, sabiendo que su historia apenas comenzaba.
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