Allí sentada ella pensaba en que mas empacar, había tirado más de medio closet en las maletas y su madre había devuelto la mayoría diciéndole: "¡Allá ni sueñes que te pondrás eso! se queda aquí!"
Entonces se levantó y abrió la primera gaveta y detalló aquella cajita morada, cien recuerdos cruzaron su mente en un segundo. Se detuvo, la miró, la tomó y la abrió; sonrió al ver su contenido, recordó cuando se puso aquello por primera vez, dos pulseras dos deseos, uno se cumplió y.. ¿qué había del otro?, se había esfumado en el viento.. Se recordó cerrando sus ojos con fuerza y pidiendo para sí "Que esté siempre conmigo!"
¿Dónde diablos estaría ahora aquel hermoso chico que fue su primer amor? Ese que le regaló aquella caja morada, vaya, ya casi había olvidado que él había existido, empezó a recordar cada momento junto a él.. "Los mejores momentos de mi vida" pensó y un portazo la devolvió a la realidad.
Fue su madre, entró al cuarto apresurada y le dijo "¿Ya lista? Perderás tu avión, hay que comprar el boleto que está reservado! Guarda en tu bolso lo que usarás en el viaje y ¡MUEVETE! Que es tarde Anne!
Sisi.- respondió ella.
Tomó su Ipod, su celular, la cámara, el cargador y tiró todo al bolso, volteó hacia la gaveta y sin saber porqué, tomó la cajita morada y la tiró al bolso también.
Se colgó el bolso, tomo un sueter y corrió tras su madre, subió al auto nerviosa y jugaba con sus uñas. Nada hablaron hasta llegar al aeropuerto, el camino se hizo corto aquel día.. Bajó del auto y tomaron las maletas, las dejaron con el demás equipaje y buscaron el boleto, sólo quedaban dos aún reservados.. su puesto y el de al lado y ya casi era la hora del vuelo, quizá viajaría sola.
Mucho mejor.- pensó, ningún loco al lado.
Su madre le dio el boleto, le dio un beso y finalmente le repitió otras 2 veces: " Debes cuidarte, no hables con nadie, disfruta mucho, llámanos cada noche, compórtate!, come pero no demasiado y toma muchas fotos, Ok?". Anne miró hacia arriba, suspiró y asintió, abrazó a su madre, le sonrió, y subió al avión.
Se sentó al lado de al ventana, una voz casi inentendible avisó que en 5 minutos partían.
Dios mio, ¡Orlando! Allá voy!.-pensó Anne, mientras buscaba en su bolso el Ipod y se colocó su música favorita, sería un largo viaje..
Dos minutos para partir, se escucha la puerta del avión abrirse, pasos rápidos, cuchicheo, cierran la puerta, se escuchan maletas mover. Anne tenía la mirada enfocada mas allá de la ventana viendo a su madre en miniatura yendo hacia al auto de nuevo a casa.
Escuchó a la azafata decir " Es aquí siéntese y abróchese el cinturón que ya despegamos..", Anne alzó la mirada, sus ojos se detuvieron en el chico que acompañaba a la azafata, estaba atónita.
No hay comentarios:
Publicar un comentario