Al principio todo era un juego, tardes juntos frente a la pantalla, riendo de tonterías en aquel típico juego que tanto nos gusta a los dos..
Y aunque sólo eran tardes a ratos, y me desconectaba mucho sin siquiera despedirme, siempre estabas la tarde siguiente en el mismo lugar, a la misma hora, quizá esperándome, quizá sólo jugando.
Te dedicaste a ser especial conmigo, y yo a hacerme la indiferente..
No se cómo, conseguiste que te diera mi Facebook.. Viste mis fotos, te encantaba mi rostro..
Yo sólo intentaba no demostrar lo alagada que estaba y lo mucho que me encantaban tus palabras, seguía siendo seria contigo.
Poco a poco, te quise y no pude negarlo más, además tu también me querias.. era todo perfecto.
Y pronto las clases terminaron, y comenzó poco a poco a cambiar mi vida.
Días enteros frente al computador.. Y luego un día conseguiste mi celular, ahora te hablaba todo el día, desde tus "buenos dias!" Hasta tus "Buenas noches hasta mañana :)"
Y me empezó a gustar a aquello, y me dejé llevar poco a poco por los sentimientos, y esto se volvió un poco mas serio..
Una tarde, un 17 de Julio, yo leía Harry Potter entre tus mensajes, preguntaste que éramos..
Ambos lo sabíamos, pero ninguno era capaz de decirlo.. un seudónimo pregunté y desde entonces todo era aún mas hermoso..
Diseñamos a lápiz nuestro futuro, y le pusimos como color, nuestros sentimientos, Y en ese diseño perfecto pusimos nuestra fe, pusimos en el promesas y juramentos, esperando con impaciencia que todo sea como lo imaginamos, como lo confeccionamos entre tardes de verano..
Y quien diría, que entre juegos y risas, surgió nuestro amor.
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