"... y me faltó ser callada cuando mis acciones hacían tanto ruido. Ahora me quedan las historias románticas que sutilmente me hieren profundo, en el fondo a una sombra de chica como yo, los libros con grandes enamoramientos de un capítulo pueden condenar el alma a una serie de recuerdos desconsoladores de otra época donde ignorante, se fue muy feliz.
Por supuesto que las entrañas traicionan y terminas actuando cual maquinaría averiada, con movimientos propios de cualquier órgano menos el cerebro o el idealizado corazón, válgame, cuánto daño me proferí a mí misma, dejándome hundir en los profundos mares de la inflexión y siendo un ser incansable en lo que jamás debió ser aprendido. Hoy miro con soledad que el color negro me cubre perfectamente para no dejar resquicio aireoso de mi cuerpo que mostrar, pues la desdicha aún mana de esta piel, la razón fue mi soberbia que empaño el amor más pulcro y pacífico que he sentido.
En algún punto reboso de tranquilidad, aún siento tu mano dibujando mis mejillas con tus caricias, pero no se por cuánto tiempo no estés. Se necesita mucho tiempo en un corazón para curar lo que yo he hecho.
Lamento con mi vida lo que he causado, quisiera poderme quedar abrazada a tu abrazo por unas horas y poderte sentir bien presente, para evadir esta idea de la soledad apresurada que me invade y debí..."
domingo, 23 de agosto de 2015
Citas averiadas
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