Dedicado a quién menos espera.

En el silencio aturdidor de esta habitación me detuve a pensar, detrás de esos rostros eternamente sonrientes hay tantas lágrimas escondidas tras un "Estoy bien". Tantas almas rogando consuelo en un eterno desespero de no ser amados, donde la amistad no llena el vacío de la necesidad real de amor, entonces suspiro, quiera ser como un niño que puede ser feliz con algo mínimo y no dejar extinguir esa alegría tan fácil, e increíblemente no puedo, jamás soporto ver que aquí mismo, si éstas pobres paredes hablaran, tendrían tantas historias tristes que contar y con mis manos en mi rostro, escondiéndolo para no gritar: Porque en este bendito mundo no puede ser todo perfecto?!, no quiero pensar, tanto sufrimiento y yo aquí sentada sin poder hacer nada, me siento inútil.

Pero hay que también analizar, que el sufrimiento es natural y que sin él la alegría jamás hemos de alcanzar, y hasta donde mis manos puedan, escribiré todo lo que desde mi corazón surja, para decirle a cada ser del mundo, que es especial ante todo, que nadie puede hacer sentirlo inferior, que el amor es cuestión de coincidencias y no siempre será perfecto pero estará bien si es honesto; y por cierto, la vida, tan divertida como le gusta ser, no da lo que quieras y pidas, te da lo que necesites, tristemente, y suele jugar también a regalarte lo que querías cuando dejes de buscarlo.

Y se que mis palabras no logran nada, pero un corazón con esperanza es invencible, y ninguna causa está perdida hasta que ningún ciego la persiga; por eso a una amiga muy especial que dedica su tiempo a pasar por acá aunque sepa que le regalaré una dosis de aburrimiento y cursileria, aun sigue entrando aquí, a ella, mis fuerzas, debes saber que cada lágrima será un minuto de felicidad, aunque ahora no lo entiendas.

Sigue adelante, siempre con esa sonrisa que conquista un mundo, la vida te espera.